Era una de esas noches donde muchos pensamientos se venían a la cabeza, donde no hallabas salida, donde solo quieres correr sin rumbo fijo, ir en un carro a máxima velocidad en una autopista toda recta, huir de todo, pero sencillamente no se podía, tenias que afrontar ese/esos problemas, tenias que buscarle una solución a ello/s.
Esas ganas de gritarle al mundo, de decírselo a alguien, de pedir ayuda, pero no, prefieres tragártelo, quemarte con eso adentro y llorar sol@, esas decisiones que tomas basándote en tus pensamientos, pero que con el tiempo te das cuenta que es tarde, existe otras que tomas y a los segundos te retractas y simplemente otras donde en tu imaginación tomaste la correcta y queda la duda y la decepción del "¿Que hubiese pasado?".
Esas ganas de no querer recordar nada, de querer sentirte como piedra, de no debilitarte y ser fuerte ante los demás, de obligarte a creer a ti mism@ que no te importa, de tratar de no pensar en ello, pero es imposible y no puedes empujarlo lejos de ti.
Entonces solo piensas que con el tiempo ya todo estará mejor, lo olvidaras y que solo a duras penas recordaras, sera una experiencia que te enseño, porque así es cada error, cada experiencia, cada persona, asi es la vida.
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